Los meses fueron pasando, el encierro empieza a pesar y las emociones están a flor de piel dentro de la casa de Gran Hermano. Y así como hay grupos, competencia, líderes, estrategias, buena y mala onda o alianzas también hay peleas, discusiones y bullying dentro del reality.
Y fue eso lo que quedó expuesto en la última edición del programa cuando salió a la luz que una de las concursantes había hecho trampa, la sancionaron, anularon su fulminante a Luz y expusieron ante todos ciertos episodios y actitudes que se dieron con fin de perjudicar al otro.
Tomando la palabra, Santiago del Moro se refirió a la mala jugada de Gabriela, quien no le ganó de buena fe a Tato quien, al darse cuenta, hizo el reclamo a producción siendo que se cansó ya que no sólo fue esta actitud de su compañera sino que ya venía vivenciando ciertos episodios de bullying tras la eliminación de Martina.
Casi llegando al final de la emisión del martes 15 de abril y tras escuchar la sanción, enterarse de que Ulises pasaba a placa y todo lo sucedido Sandra puso el grito en el cielo y comenzó a discutir con Chiara, Catalina y Gabriela. Asimismo, abriéndose del grupo, Luz, Tato y Luchi fueron a hablar a solas en un rincón.
LLANTOS, DISCUSIONES Y ALIANZAS EN LA CASA
En ese triángulo de alianza, la novia de Lauthy Gram se mostró contenta y celebró la decisión de Gran Hermano mientras la salteña se quebró. “¡Qué bronca, bol…! ¡Se pasan!”, lanzó Luz enojada y sensibilizada por haber salido de placa esta semana. A lo que Tato acotó: “Nosotros no somos como ellos».
«No entremos en la de ellos, nosotros somos distintos. La gente está cansada de los vivos”, agregó Algorta quien luego se alejó de sus dos compañeras y se fue a sentar solo al lado del yacuzzi donde se puso a llorar y desahogarse entre tanta bronca a impotencia acumulada.